Clima

Por estar localizada entre las coordenadas geográficas 17° 30 y 19° 56 latitud norte y las 68° 19 y 72° 31 longitud oeste, la República Dominicana se encuentra en la región tropical. Tiene un relieve muy accidentado: cerca del 50% de su territorio lo ocupan cinco sierras y tres grandes cordilleras, entre las cuales se encuentran las mayores alturas de Las Antillas (Pico Duarte 3,187 msnm). El resto de la superficie del territorio nacional está compuesta por cuatro grandes valles, el principal el Valle del Cibao. Todos estos sistemas están dispuestos de Noroeste a Sureste, lo que influye sobre la dirección de los vientos alisios y éstos, a su vez, en la distribución de las lluvias, por lo que en el país hay diversos microclimas.

En la República Dominicana se han identificado nueve zonas de vidas o zonas ecológicas y siete formaciones de transición, de las cuales el bosque húmedo subtropical es el que ocupa la mayor extensión, disperso en todo el territorio nacional. El país también está dividido en 20 regiones geomorfológicas y ocho subregiones.

¿Sabías que? La República Dominicana, por su posición geográfica, presenta un clima tropical, influido por diversos factores geográficos, como la orografía y la influencia de los vientos alisios, además de los fenómenos atmosféricos que la afectan durante todo el año.

Temperatura

La variabilidad en el comportamiento de las temperaturas en la República Dominicana está íntimamente asociada a dos factores básicos: la localización geográfica y los sistemas montañosos existentes en toda la geografía nacional. La temperatura media anual es de unos 25 ° C (77 ° F), que se define como un clima tropical cálido. La temperatura más elevada, unos 34 ° C (93 ° F), se registra en los meses de junio a agosto, y la más baja, 19 ° C (66 ° F), se registra entre los meses de diciembre y febrero.

¿Sabías que? Existen dos zonas de baja temperatura coincidentes con la parte alta de la Cordillera Central y un tercer centro de baja temperatura que se mueve desde la Cordillera Septentrional hasta la costa Atlántica, en la cuenca del río Yásica.

Precipitaciones

En la República Dominicana se presentan tres temporadas de lluvias: temporada frontal (noviembre-abril), temporada convectiva (mayo-julio) y temporada ciclónica (agosto-octubre).

Las zonas de alta precipitación están altamente influidas por los vientos alisios cargados de humedad sobre el océano Atlántico, que llegan al país por el Nordeste, produciendo las llamadas lluvias orográficas. Esto ocurre primero en la Cordillera Septentrional, la Sierra de Yamasá y luego en la Cordillera Central. Los valores anuales de estas zonas fluctúan entre 1,800 y 2,500 mm, con excepciones en las zona kárstica de Los Haitises, donde se han registrado por encima de los 3,000 mm al año.

Esta misma relación, pero inversa, explica lo que ocurre en las áreas de menor precipitación, que se convierten en regiones frágiles propensas a los procesos de sequías y desertificación. Es el caso de las regiones noroeste, con precipitaciones entre 600-900 mm y la región suroeste, con precipitaciones que oscilan entre 700-400 mm.

Para acceder a informaciones diarias y pronósticos climatológicos actualizados, le invitamos a visitar la Oficina Nacional de Meteorología (ONAMET): http://www.onamet.gov.do/ o bien llamar  a sus teléfonos: 809-788-1122 y desde el interior sin cargos: 1-809-200-8585. ONAMET ofrece asistencia las 24 horas del día, 7 días a la semana.

¿Sabías que? Puedes conocer el Informe del tiempo actualizado aquí: http://www.onamet.gov.do/?param=pronostico-general

Otras referencias de interés:
Organización Meteorológica Mundial
Centro de Meteorología de CNN
Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos
Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (en español)

Temporada ciclónica

La temporada de huracanes o temporada ciclónica se inicia el 1 de junio y concluye el 31 de noviembre. Según la Oficina Nacional de Meteorología (ONAMET), el período más crítico se da entre el 15 de agosto y el 15 de septiembre.

En los últimos cien años, el país se ha visto afectado por los siguientes huracanes, algunos de los cuales han provocado grandes daños en todo el territorio nacional:

• Lilis (1894)
• San Zenón (1930)
• Inés (1966)
• David (1979)
• Georges (1998)
• Odette (2003)
• Jeanne (2004)
• Alpha (2005)
• Noel (2007)
• Olga (2007)

¿Sabías que? Los huracanes San Zenón (1930) y David (1979) fueron categoría 5.

¿Sabías que? Tras un ciclo tranquilo de 23 años, según los investigadores, la actividad ciclónica cambió en el año 1995 a un período hiperactivo que podría durar dos o tres décadas.

¿Sabías que?  Los ciclones se designan con nombres femeninos y masculinos, en orden alfabético, alternándose por temporada y por año. Si una temporada comienza con un nombre femenino, la siguiente inicia con uno masculino; en adición a esto, se han coleccionado seis listas de nombres con los tres idiomas oficiales de la región (español, inglés y francés) con 21 nombres cada una. La temporada más activa que se ha tenido hasta el momento es la de 1933, con 21 ciclones tropicales nombrados.

Escala de desastre potencial de un huracán

La escala de desastre potencial de Saffir-Simpson clasifica a los huracanes en cinco categorías, de acuerdo a la velocidad superficial sostenida de sus vientos y al oleaje. La finalidad es orientar sobre los daños probables que generaría un huracán si golpeara un área costera sin cambio en su poder destructivo. A partir de la categoría 3, a los huracanes se les denomina «intensos».

Recomendaciones para la temporada de huracanes (temporada ciclónica)

Al comenzar la temporada de huracanes:

• Prepare un plan de acción para su familia y asegúrese de que todos saben lo que tienen que hacer si hay una amenaza de huracán o tormenta tropical.
• Desarrolle un plan vecinal para enfrentar los ciclones.
• Haga una evaluación de sus existencias de madera, herramientas, baterías, alimentos enlatados que no requieran refrigeración y otros equipos que usted pueda necesitar.
• Identifique los peligros potenciales que hay dentro de su hogar o vecindario y tome las medidas correctivas pertinentes.
• Averigüe si usted vive en un área de evacuación y conozca cuáles son las vías señaladas para dirigirse a un lugar seguro o refugio.

Cuando se emitan avisos de huracán o tormenta:

• Asegure sus pertenencias personales y documentos de valor, lámparas de gas, linternas , velas y equipos que funcionen con baterías y provéase de baterías nuevas.
• Provéase de gasolina para su automóvil.
• Almacene en un sitio seguro los objetos sueltos como zafacones y elimine aquellos objetos o escombros de los alrededores de su hogar.
• Refuerce las ventanas, puertas y techo de su casa. Cubra con planchas de madera precortadas las puertas corredizas de cristal o puertas francesas.
• Aunque las cintas adhesivas en las ventanas no evitan que se rompan los cristales, si ayudan a prevenir que los vidrios se dispersen por todas partes.
• Provéase de alimentos especiales para niños. Almacene suficientes alimentos para 5 ó 10 días.
• Lleve su nevera al punto más frío, ábrala solamente cuando sea absolutamente necesario y ciérrela cuanto antes.
• Prepare su reserva de agua antes de que el huracán azote.

Durante la tormenta o huracán:

• Mantenga la calma. No preste atención a rumores.
• Dentro de su hogar permanezca en una habitación interior o sin ventana. Es la más segura.
• No salga a la intemperie.
• Suprima el uso de bebidas alcohólicas.
• Permanezca escuchando por la radio y la televisión de baterías, todos las partes oficiales del Centro de Información de Huracanes de la Oficina Nacional de Meteorología.
• Si el ojo del tormenta o huracán pasa por su localidad, habrá una calma temporera en los vientos. Eso no quiere decir que el peligro ha pasado. Permanezca dentro de su casa, a no ser que tenga que hacer alguna reparación de emergencia, pero tenga en cuenta que pasados unos minutos, no más de media hora, sorpresivamente, el viento comenzará a soplar en la dirección opuesta y con más velocidad que antes.

Después del huracán o tormenta:

• Permanezca en su casa el mayor tiempo posible. Las calles estarán llenas de escombros y cables de electricidad caídos que pueden tener carga eléctrica.
• Sintonice estaciones de radio para escuchar las últimas noticias.
• Si es desalojado de su hogar, no vuelva hasta que su área esté lista.
• No regrese: una casa estructuralmente dañada debe ser inspeccionada por funcionarios de construcción.
• No use el teléfono a menos que sea una emergencia y no llame al 911, a menos que se trate de una amenaza de vida.
• No llame para reportar interrupciones individuales de electricidad, agua o servicio telefónico. Llame a las autoridades para reportar líneas eléctricas rotas y escapes de gas y agua.
• El agua potable puede estar contaminada después de la tormenta, así que trate de hervir toda el agua que utilice.
• Consuma agua embotellada y coma productos enlatados.
• Tenga cuidado al cortar árboles y al encender estufas y gas.
• Desconecte los generadores antes de restaurar la electricidad en su hogar.
• No toque cables eléctricos caídos, pueden ser muy peligrosos.
• Ayude a sus vecinos a retirar los desechos de las calles, dando acceso a los servicios de emergencias e inspectores del seguro.
• No se pare sobre un sitio mojado si está operando algo eléctrico.
• No deje que sus niños jueguen con agua estancada ni caminen descalzos.
• Si tienen que vivir en otro lugar mientras reparan su hogar, asegúrese de que todas las entradas de su casa estén cerradas, para evitar vandalismo.
• No use artefactos de gas si han estado inundados.

ONAMET: www.onamet.gob.do | 809-788-1122 y desde el interior sin cargos: 1-809-200-8585. Disponibilidad de servicios las 24 horas del día.
Teléfono Nacional de Emergencias: 911
Otras recomendaciones útiles: http://www.cdc.gov/spanish/especialescdc/huracanes/