Teatro Nacional: 40 años al servicio del arte y la cultura dominicana

Teatro Nacional: 40 años al servicio del arte y la cultura dominicana
Santo Domingo, República Dominicana 29/7/2013

U bicado en un espacio céntrico de la capital de Dominicana, diseñado para acoger el arte y la cultura de los artistas locales y extranjeros se erigió el Teatro Nacional Eduardo Brito, entidad creada por la inspiración de un destacado arquitecto, que empeñado en hacer una obra que supere a las existentes en los países colindantes, recorrió varias naciones de Europa y América, para entregar luego al presidente de la época un monumento lleno de esplendor y que perdurara en el tiempo.

Inaugurado el 16 de agosto del 1973 por el entonces presidente, Joaquín Balaguer, esta edificación ha sido escenario de la presentación de grandes espectáculos nacionales e internacionales. Su sala principal ha escogido las mejores voces de la opera, merengue, baladas y demás géneros musicales, en una mezcla de elementos que hacen de este espacio el más codiciado de los escenarios locales para presentaciones artísticas.

El teatro Nacional fue designado con el nombre de Eduardo Brito, en honor al gran barítono criollo, considerado el artista nacional. Consta de tres salas: Carlos Piantini, José de Jesús Ravelo y la Sala Aída Bonnelly de Díaz (antigua Sala de la Cultura), además del “Bar Juan Lockward”, un café-concierto para disfrutar lleno de alegría.

Este año este espacio de gala, cumple sus 40 aniversarios y el Ministerio de Cultura ha querido celebrarlo por todo lo alto con varias actividades artísticas, entre ellas la presentación, por segunda ocasión en el país, de la ópera “La Bohème”.

El cantante Niní Cáffaro, director del Teatro Nacional explicó, que aunque el aniversario se cumple en agosto, las celebraciones abarcan todo el año: “El Teatro va tener un año entero celebrando, en el mismo mes de agosto tendremos la opereta La viuda alegre. Habrá muchas actividades, como la presentación de la cantante Miriam Hernández, el trío de ópera pop Il Volo, la dedicación de una de las salas de ensayos a María Castillo, entre otras acciones”.

Añadido a estas actividades, Cáffaro anunció la reinauguración de la fuente de agua ubicada en la parte frontal del edificio y la construcción de un baño en una de las salas “esta fuente ahora tendrá el lujo que amerita tener y ya se están terminando las partes de las luces, va a tener nueva fusión de agua, tendrá una bomba eléctrica que va estar constantemente echando agua y vamos a tener también posiblemente para finales de agosto por primera vez un baño en la Sala Aída Bonelly”.

Tener recursos para remozar la parte física del teatro es un anhelo que tiene el también intérprete de “Por amor”, que a su entender ya lo necesita “lo único que necesitamos para tener el 40 aniversario completo es remozar la parte física, que en 40 años ya ha cumplido su cometido”.

En ese sentido avanzó que está pautado para principio del 2014 cambiar los pisos, las alfombras y todas las sillas de la sala principal “esa es la esperanza que tenemos porque ya como tú conoces la parte del Backstage, los camerinos completos son nuevos y modernos como debe ser y que no tiene nada que envidiarle a ningún teatro de América”.

La Bohéme

Con la puesta en escena de esta ópera el 9, 10 y 11 de agosto el Ministerio de Cultura, se propone que este tipo de género, reservado para la clase culta, llegue a todos los sectores de la sociedad dominicana, razón por la que el ultimo día, en colaboración con el Despacho de la Primera Dama, se montaran pantallas gigantes en plazas, y parques, además de ser televisada. La Bohéme se presentará a las 8:00 de la noche en la Sala Carlos Piantini del Teatro Nacional.

El funcionario dijo que se ha dispuesto todo lo necesario para que la presentación de la ópera sea un éxito “yo quisiera que las expectativas se generen en el pueblo, hace 12 año que no se presentaba opera formar y elegimos la Bohéme que es una ópera muy pesada, muy pesada en el sentido de que es una de las opera más bellas que hay y es una ópera con todo lo actos que conlleva”.

Teófilo Carbonell Seijas fue el arquitecto de esta obra, situada en la máximo Gómez, en la Plaza de la Cultura, en su construcción participaron, además los ingenieros Williand Read y Juan Manuel Bonetti y con la Casa Peter Albretch Corporation, como encargada de la acústica y el escenario. Las tres salas que la componen tienen capacidad la principal Carlos Piantini con capacidad para 1,5000 personas, la Ravelo para 255 personas y la de la Aída Bonnelly para 190 personas. Además de las salas de ensayo.