Polo V
Definido mediante el Decreto No. 16-93, de fecha 22 de enero de 1993, abarca las provincias de Monte Cristi, Dajabón, Santiago Rodríguez y Valverde, correspondientes a la sub-región Noroeste o Cibao Occidental de la República Dominicana. Su superficie es de 4,879 kilómetros cuadrados para una población de 387,712 habitantes.
De tierra fértil enriquecida con minerales, de las provincias que conforman esta área turística, Monte Cristi es la mayor en extensión, con una superficie de 1,924 kilómetros cuadrados, y una población de 95,705 habitantes, seguida por Santiago Rodríguez con 1,111 kilómetros cuadrados y 62,144 habitantes. Dajabón, con 1,020 kilómetros cuadrados, cuenta con una población de 68,606 habitantes; y finalmente Valverde, sobre una superficie de 823 kilómetros cuadrados con una población aproximada de 153,050 habitantes.
Monte Cristi fue descubierta por el Almirante Cristóbal Colón en su primer viaje, por lo que este nombre entra en las crónicas del Nuevo Mundo a los pocos días del descubrimiento de la Isla, cuando el navegante expresa en su diario la hermosura y riqueza del lugar y le da el nombre que aún lleva.
La ciudad principal de esta provincia es San Fernando de Monte Cristi, fundada en el siglo XVI, durante el gobierno del Comendador de Lares, fray Nicolás de Ovando. Actualmente cuenta con una población de 20,259 habitantes, sobre una superficie de 524 kilómetros cuadrados. Ciudad próspera, portuaria y comercial, llegó a ser un importante centro económico. En 1606, el gobernador de entonces, Antonio de Osorio, por orden real destruye las ciudades del litoral norte, a fin de acabar con el contrabando que realizaban los pobladores de esa región con los navegantes de barcos holandeses y portugueses que visitaban con frecuencia esos puertos. Tiempo después, el brigadier Rubio y Peñaranda reconstruye y repuebla la ciudad con familias procedentes de las Islas Canarias.
Otro dato importante en la historia de esta ciudad lo constituye el hecho de la redacción del “Manifiesto de Montecristi”, en fecha 25 de marzo de 1885, firmado por el General Máximo Gómez y el libertador cubano José Martí, reafirmando la hermandad entre los pueblos dominicano y cubano.
Esta provincia presenta gran diversidad en su suelo, donde podemos encontrar zonas de tierras altas situadas entre sistemas orográficos y varias planicies costeras, así como zonas de tierras bajas que forman el Valle del Noroeste con varias fuentes de riego, siendo la principal el Río Yaque del Norte. Ofrece, además, gran variedad de flora y de fauna, encontrándose desde plantas xerófilas, bosques frutales, palmeras, manglares, variedad de hortalizas hasta pastizales naturales.
Su mayor producción agrícola está integrada por arroz, plátanos, bananos, melones, tomates y otros frutos menores. Importante en su economía es la crianza de ganado, especialmente el caprino (famoso por su sabor debido a que se alimentan con pastizales aromáticos).
Otro renglón importante son las minas de sal, que aportan su sello característico al paisaje marino. Entre los múltiples atractivos y riquezas naturales de Monte Cristo se destacan el Parque Nacional de Monte Cristi, de la categoría de bosque seco subtropical, con abundante variedad de vegetación y una fauna digna de encomio, con once especies de reptiles, incluyendo el cocodrilo americano, numerosas aves, entre las que abundan el pelícano, el flamenco, la tijereta, la paloma y la golondrina, entre otras. Siete cayos, llamados “Los Siete Hermanos”, se convierten en testigos del fenómeno migratorio de aves que se desplazan cada año desde La Florida a hacer sus nidos en las cálidas y acogedoras tierras dominicanas.
En la provincia destaca el Caño de Estero Hondo, configurado en forma de “T” invertida, de gran diversidad biológica. Sus aguas son propicias para la supervivencia del manatí, donde la especie se produce. Los manglares y las aguas del caño conforman avenidas marinas majestuosas que se recorren en una pequeña embarcación del área protegida.
De impresionante majestuosidad y belleza es el Morro, desde donde se domina toda la bahía con sus cayos y su sistema de lagunas costeras. Es un escenario capaz de provocar el éxtasis de los sentidos. Colón se impresionó tanto con el terruño que mira al mar que en su diario escribió lo siguiente: “ …Este Monte Cristi es muy hermoso y alto y andable, de muy linda hechura y el queda así de alto que viéndolo de lejos parece Isla que no comunique con ninguna tierra…”.
Entre otras áreas de gran interés turístico se pueden mencionar los esteros o caños navegables cubiertos de mangles, la reserva científica Villa Elisa, el famoso reloj de cuerdas del siglo pasado, el museo de Máximo Gómez y José Martí, y la arquitectura victoriana que podemos aún admirar en las calles de la ciudad.
Por su parte, la provincia de Dajabón, cuya ciudad principal es del mismo nombre, fue fundada en el siglo XVIII, durante el gobierno de don José Solano y Bote. Cuenta con una población de unos 22,446 habitantes y una superficie de 341 kilómetros cuadrados. Fue escenario de varias gestas heroicas que contribuyeron a la independencia del país. Es la única ciudad de la Región Noroeste del país que hace frontera con Haití, por lo que se hace notoria cierta transculturación en las manifestaciones de usos y costumbres.
Su economía es esencialmente agrícola; entre sus principales cultivos se encuentran el arroz, el tabaco, la habichuela, el café, y, en menor escala, la cebolla, el plátano, el guandul y el guineo.
Otra actividad importante de la provincia noroestana es la ganadería. En los últimos años, la actividad comercial ha presentado un crecimiento apreciable, abasteciendo en parte el mercado consumidor de Juana Méndez, Haití, a través de ventas populares llamadas “Ferias”.
Dajabón cuenta con varios atractivos turísticos, sobre todo ecológicos, debido a la diversidad de los ecosistemas, como el del Parque Nacional de Nalga de Maco y el Salto del Balneario de Loma de Cabrera. De gran interés es El Centro Ceremonial y de Arte Rupestre Prehispánico de Chacuey, el Monumento de la Restauración en Capotillo, el Valle intramontano del Río Limpio de Restauración, la línea fronteriza con el puente de Dajabón.
La provincia de Santiago Rodríguez tiene como ciudad principal a San Ignacio de Sabaneta, fundada por residentes de Dajabón a mediados del siglo XIX. Cuenta con una población de 46,300 habitantes sobre una superficie de 948 kilómetros cuadrados. Su principal actividad económica es la agricultura, siendo sus productos más importantes el arroz, el tabaco y otros frutos menores.
Entre sus atractivos principales se encuentran los Parques Nacionales Nalga de Maco, Armando Bermúdez y José del Carmen Ramírez, los balnearios de los Ríos Guayubín y Mao, los talleres de casabe, sus talleres artesanales, y sus hermosas montañas.
La provincia de Valverde cuenta con tres municipios, siendo Mao la ciudad principal, con una población aproximada de 68,786 habitantes y una superficie de 415 kilómetros cuadrados. Fundada a principios del siglo XVII, como consecuencia de la devastación de
Osorio en el litoral norte, para evitar que continuara el contrabando que realizaban los nativos con holandeses y franceses, los habitantes desalojados fundaron hatos en diversos puntos del Cibao, entre ellos Mao, a orillas del río que lleva el mismo nombre. Los lugareños y visitantes la llaman “La Ciudad de los Bellos Atardeceres”. De suelo llano y fértil, posee dos excelentes canales de riego. La principal actividad económica es la agropecuaria, y su principal producto el arroz. Otros rubros son: el guineo, el maíz, la yuca, y diferentes granos, el tabaco y otros frutos menores.
Sus principales atractivos turísticos son la famosa Ruta de Colón o Paso de Los Hidalgos. Se cuenta que una vez llegado a La Isabela, el almirante Colón mandó a los más nobles de sus acompañantes a abrirse paso hacia el interior de la isla y estos, ayudados por los indios, llegaron a un alto en las montañas que se llamó desde entonces el Paso de los Hidalgos. Valverde tiene también montañas con paisajes espléndidos, la artesanía, los balnearios de los ríos Mao y Amina, sus cementerios indígenas, y su arquitectura victoriana, entre otros.
Monte Cristi
Dajabón
Mao